El tercer mensaje de los Ayunos Nacionales de Pastores fue una solemne e impactante interpelación a la conciencia ministerial, presentada por el Rvdo. Abraham Vallejo. Bajo el título "¿Cómo estás sobreedificando?", el sermón se fundamentó en el conocido, pero a menudo ignorado, pasaje de 1 Corintios 3:10-15. El mensaje fue un llamado urgente a examinar la calidad, la motivación y la trascendencia de nuestra labor en la obra de Dios.

El Fundamento Ya Está Puesto

El Rvdo. Vallejo comenzó estableciendo una verdad irrefutable. Como ministros, no estamos a cargo de la cimentación. Ese trabajo ya fue hecho.

"Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está puesto, el cual es Jesucristo." (1 Corintios 3:11)

El fundamento es Cristo. No es nuestra denominación, no es nuestro carisma, no es nuestro programa eclesiástico. El debate, por lo tanto, no es sobre qué construimos, sino cómo construimos sobre lo que ya está firme.

La Advertencia del "Perito Arquitecto"

El apóstol Pablo se identifica a sí mismo como un "perito arquitecto" que puso el fundamento, pero lanza una advertencia universal a todos los que vienen después de él:

"Conforme a la gracia de Dios que me ha sido dada, yo como perito arquitecto puse el fundamento, y otro edifica encima; pero cada uno mire cómo sobreedifica." (1 Corintios 3:10)

Esta frase, "cada uno mire cómo sobreedifica", fue el eje central del mensaje del Rvdo. Vallejo. ¿Estamos prestando atención a nuestros métodos y materiales?

Los Materiales: Oro y Hojarasca

El pastor Vallejo expuso la clara distinción que hace Pablo entre dos tipos de constructores (1 Corintios 3:12).

1. Materiales Permanentes: Oro, plata y piedras preciosas.
2. Materiales Perecederos: Madera, heno y hojarasca.

El Rvdo. Vallejo argumentó que la "madera, heno y hojarasca" representan ministerios construidos sobre lo temporal:

• El entretenimiento para atraer multitudes.
• La elocuencia humana sin el respaldo del Espíritu.
• Las doctrinas de moda que apelan al ego.
• La búsqueda de la aprobación de los hombres.
• El activismo sin oración.

Por el contrario, el "oro, plata y piedras preciosas" representan el ministerio eterno:

• La doctrina pura e inalterable.
• La oración y el ayuno como base de operaciones.
• Las almas ganadas para Cristo.
• La edificación de discípulos maduros.
• Las motivaciones puras que solo buscan la gloria de Dios.

El Día de la Prueba: Todo Pasará por Fuego

La razón por la que debemos "mirar cómo sobreedificamos" es porque viene un día inevitable de inspección.

"...la obra de cada uno se hará manifiesta; porque el día la declarará, pues por el fuego será revelada; y la obra de cada uno cuál sea, el fuego la probará." (1 Corintios 3:13)

El Rvdo. Vallejo fue enfático: el fuego no prueba la cantidad de nuestra obra, sino la calidad. El fuego no destruye el oro; lo purifica. Pero el fuego consume instantáneamente la hojarasca.

Podemos engañar a las juntas directivas, a las congregaciones e incluso a nosotros mismos, pero no podemos engañar al fuego del juicio de Dios sobre nuestro servicio.

El Resultado: Recompensa o Pérdida

La conclusión del pasaje, y del sermón, es aleccionadora y presenta dos posibles resultados para el siervo de Dios.

1. Recompensa (v. 14): Si la obra (el oro, la plata) permanece después del fuego, el constructor "recibirá recompensa".

2. Pérdida (v. 15): Este fue el punto más solemne. Si la obra se quema (madera, heno), el constructor "sufrirá pérdida".

"Si la obra de alguno se quemare, él sufrirá pérdida, si bien él mismo será salvo, aunque así como por fuego." (1Corintios 3:15)

El Rvdo. Vallejo describió esta imagen: la de un siervo que entra al cielo oliendo a humo, salvando su vida "raspando", pero llegando con las manos vacías. Perdió todo su trabajo, toda su recompensa, porque edificó con materiales inútiles.

La pregunta del Rvdo. Abraham Vallejo resuena profundamente después de este mensaje: ¿Estás construyendo un ministerio que resistirá el fuego, o uno que será consumido en un instante?